Día Mundial de la Diabetes

El 14 de noviembre es el día mundial de la diabetes, como esta enfermedad también puede afectar a nuestros mejores amigos, consideramos importante hablar del tema para poder detectarla a tiempo y tomar las medidas necesarias. Al igual que sucede en personas humanas, los perros y gatos también se pueden ver afectados por la diabetes, este trastorno del sistema endocrino puede provocar esta enfermedad, tenemos que estar atentos a las señales para poder detectar a tiempo este problema en nuestros peludos.

¿Con qué tipos de diabetes nos podemos encontrar?

La diabetes es es una enfermedad en la que los niveles de glucosa (azúcar) de la sangre están muy altos. La glucosa proviene de los alimentos que consumen. En la diabetes que puede afectar a perros y gatos encontramos dos tipos:

Diabetes tipo 1:
En este tipo de diabetes hay falta de insulina, es el tipo de diabetes más frecuente en los perros diabéticos. Esto se da debido a que el páncreas, que es el encargado de la producción de insulina, no hace bien su función por estar dañado.

Diabetes tipo 2:
Esta se produce cuando hay insulina pero resulta insuficiente, este tipo de diabetes está muy relacionada con la obesidad.

Tanto canes como felinos son susceptibles de padecer estos trastornos, aunque existen diferencias relacionadas con la presentación clínica, el diagnóstico, o el tratamiento de la enfermedad.

Síntomas de la diabetes en canes y felinos

Los síntomas más frecuentes que podemos observar en nuestros perros y gatos pueden ser:

• Beber más agua de lo normal de manera exagerada
• Orina más abundante de lo habitual
• Cansancio inusual
• Repentina pérdida de peso
• Mucho apetito

Todos estos síntomas pueden remitir cuando la diabetes esté bajo control consiguiendo estabilidad en nuestro animal. La mejor batalla contra esta enfermedad es estar muy atentos a posibles cambios o anomalías que podamos observar en nuestros animales y aplicando las medidas preventivas oportunas.

Diagnóstico y tratamiento

El diagnostico del animal deberá realizarlo un veterinario que podrá prescribir el tratamiento más adecuado para tu gato o perro. Normalmente los tratamientos suelen ser efectivos y la diabetes se puede estabilizar mucho con ejercicio moderado y dieta, los grandes aliados para regular los niveles de glucosa en la sangre de nuestros animales.

La diabetes bien llevada, no es un impedimento para que puedas seguir disfrutando de tu peludo durante muchos años y tener una calidad de vida similar a la de cualquier animal sano.